Aunque no es una lista exhaustiva de personajes relevantes de la historia y la única persona no hombre mencionada que no sea una actriz es Sally Ride, la canción funciona como una cápsula del tiempo que refleja las figuras consideradas importantes en su momento. Sin embargo, algunos nombres permanecen en nuestra memoria, mientras otros han caído en el olvido a pesar de la relevancia que tuvieron en su época. Aquí te presentamos algunos personajes históricos de «We Didn’t Start the Fire» que quizás no conozcas en profundidad.
Walter Winchell: Inventor de la crónica rosa
Nacido el 4 de abril de 1897 en East Harlem, Walter Winchell pasó de ser un actor de vodevil a convertirse en uno de los cronistas de chismes más famosos en Estados Unidos. Según la NYPL, Winchell inventó efectivamente la columna de chismes moderna, usando juego de palabras y creando un nuevo slang para sus columnas. Muchas de estas frases, conocidas como «Winchellisms,» llegaron a ser comunes, como la expresión de un bebé como un «evento bendecido».
Para los años 30, Winchell se trasladó a la radio y se convirtió en «el periodista más popular e influyente del mundo». Sin embargo, pronto su pedestal empezó a tambalearse. Antes del fallecimiento en 1949 del Secretario de Defensa, James V. Forrestal, según Time Magazine, Winchell y el comentarista Drew Pearson atacaron duramente a Forrestal, acusándolo de tener vínculos con Wall Street y políticas agresivas. Estas acusaciones terminaron en la muerte de Forrestal, quien se suicidó, y varios periódicos como The New York Times y The Washington Post criticaron duramente a Winchell y Pearson, señalando que habían sobrepasado los límites de la ética periodística.
Rosenbergs: Civiles ejecutados por espionaje
En 1950, Ethel y Julius Rosenberg fueron arrestados por sospecha de espionaje, siendo acusados de transmitir secretos nucleares a la Unión Soviética, algo que su hermana menor, Sgt. David Greenglass, admitió haber ayudado en el envío de información confidencial a los soviéticos. Según la Fundación del Patrimonio Atómico, no pudieron ser acusados de traición porque Estados Unidos no estaba en guerra en ese momento, pero sí de conspiración y de haber brindado secretos atómicos. Tras ser hallados culpables, en 1953 ambos fueron ejecutados, convirtiéndose en los primeros civiles en la historia de EE. UU. en ser ejecutados por espionaje.
La justicia consideró que Greenglass, empleado en Los Alamos, logró pasar información a Julius, quien a su vez compartió conocimientos sobre investigación atómica. Greenglass alteró su testimonio en un intento por proteger a su esposa, Ruth, quien pudo no haber sido acusada formalmente, pero su papel en el caso fue clave.
La despedida de Santayana: Muerte de un filósofo
Jorge Agustín Nicolás Ruiz de Santayana y Borrás, conocido como George Santayana, fue un filósofo español-americano que falleció el 26 de septiembre de 1952. Considerado uno de los pensadores más influyentes del siglo XX, sus escritos abarcaban desde novelas semi-autobiográficas, poesía, ensayos y filosofía, influyendo en varias generaciones. Sin embargo, tras su muerte, sus textos han sido poco enseñados y muchas de sus frases se recuerdan de manera superficial, como la famosa “Aquellos que no pueden recordar el pasado…”, que a menudo se atribuye erróneamente a otros.
Su obra pretendía acabar con la filosofía cartesiana y proponer un nuevo punto de partida. Para Santayana, la idea de certeza es «una visión trascendental de la esencia» y nada tiene que ver con el conocimiento o la ciencia. Ironías del destino, su única frase que aún se cita, aunque sin atribución clara, es la de que «los que no recuerdan su historia están condenados a repetirla».
Malenkov: ¿Quién sucedió a Stalin?
Aunque todos conocen a Nikita Khrushchev como el líder de la Unión Soviética tras la muerte de Stalin en 1953, en realidad fue Giorgi Malenkov quien le sucedió temporalmente. Tras la muerte de Stalin el 5 de marzo de 1953, Malenkov asumió brevemente el poder, solo para ser desplazado varias semanas después por Khrushchev. Aunque fue primer ministro hasta 1955, su liderazgo no duró mucho, y fue destituido en 1964 tras varios intentos fallidos de golpe.
Intentó en 1956 un golpe junto a Kaganovich, Molotov y Bulganin, pero fue rechazado y enviado a KAZAKHSTÁN. En la estación hidroeléctrica de Ust-Kamenogorsk, no fue respetado y tuvo que renunciar. Murió en 1988, viviendo en relativa oscuridad. Aunque muchas veces considerado revisionista, algunas propuestas suyas, como impulsar la producción de alimentos y bienes de consumo, fueron finalmente implementadas.
Nasser: La revolución en Egipto
El 23 de julio de 1952, General Naguib y el coronel Gamal Abdel Nasser lideraron un golpe de Estado contra la monarquía egipcia. El rey Farouk fue obligado a abdicar y se exilió en 1953, en una breve vinculación con el pasado colonial y la influencia extranjera, incluso la ayuda de la CIA en el golpe, conocido como Proyecto Fátima. En 1954, Nasser sustituyó a Naguib como presidente tras la dimisión de este, y se convirtió en una figura central en la política del país, promoviendo el nacionalismo árabe y enfrentándose a las potencias occidentales.
Prokofiev: El músico que se fue
Sergei Prokofiev fue uno de los compositores más prolíficos del siglo XX. Nació en Sontsovka, Ucrania, en 1891 y falleció el 5 de marzo de 1953, justo el día en que Stalin murió. Según La Scena Musicale, su muerte coincidió con la de Stalin y fue vista como «la última víctima de Stalin». Prokofiev dejó un legado de óperas, ballets y piezas para piano famosas, incluyendo su adaptación de «Pedro y el lobo.» Su muerte ocurrió justo antes del funeral de Stalin, sin flores en su funeral porque las autoridades sequestraron todas. La noticia tardó en difundirse en Occidente.
Roy Cohn: El mano derecha de McCarthy
Roy Cohn saltó a la fama al acusar a los Rosenberg y en su interrogatorio se mostró como uno de los abogados más dedicados contra el comunismo, aliado de McCarthy durante la caza de brujas roja. Después de su papel en las audiencias del ejército en 1954, su imagen se deterioró y se convirtió en un experto en manipular la opinión pública, incluso trabajando para Donald Trump en los años 70. Falleció en 1986, dejando un legado polémico en la historia política estadounidense.
Juan Perón: El exilio y regreso
En 1955, Juan Domingo Perón fue derrocado por la fuerza militar y exiliado, regresando a Argentina en 1973, donde permaneció como presidente hasta su muerte en 1974. Durante su mandato, este líder nacionalista nacionalizó bancos y recursos, mejoró la economía y apoyó a los trabajadores, aunque también fue criticado por su autoritarismo y acciones controvertidas, como permitir la fuga de criminales nazis y manipular el voto femenino para sus intereses políticos.
Zhou Enlai: Evitando la muerte
El 11 de abril de 1957, el vuelo _Kashmir Princess_ explotó en pleno vuelo desde Hong Kong a Bandung, pero Zhou Enlai, el entonces premier chino, no estaba en el avión. La explosión fue un intento de asesinato, y se cree que fue por parte de grupos que querían eliminarlo, aunque nunca se comprobó su responsabilidad. Zhou sobrevivió a varias amenazas, incluyendo purgas en la Revolución Cultural y ataques durante la visita de Nixon a China en 1972. Murió en 1976 por cáncer, dejando un legado estratégico en la política china.
Syngman Rhee: Rescate por la CIA
Designado en 1945 por Estados Unidos como líder de Corea del Sur, Rhee gobernó con mano dura, apoyado por la CIA, tras consolidar su poder en medio de conflictos internos, guerras civiles y violaciones a los derechos humanos. Se le acusa de ejecuciones sumarias y represión. En 1960, tras protestas estudiantiles y sociales, fue obligado a dimitir, y en 1961, la CIA lo exilió a Honolulu, donde vivió hasta su muerte en 1965. Su legado sigue siendo controvertido, marcado por su fuerte anti-comunismo y autoritarismo.
Begin: Negociando los Acuerdos de Camp David
En 1978, el primer ministro israelí Menachem Begin negoció con el presidente estadounidense Jimmy Carter y el presidente egipcio Anwar el-Sadat los Acuerdos de Camp David, considerados un pilar para la paz en Oriente Medio. Sin embargo, estos acuerdos no abordaron los conflictos básicos en la región ni resolvieron el estancamiento del proceso de paz, y algunas políticas de Estados Unidos en ese momento perpetuaron la ocupación israelí y las tensiones en la zona.
Bernie Goetz: El vigilante del metro
El 22 de diciembre de 1984, Bernie Goetz, un ciudadano blanco de Nueva York, fue abordado por cuatro adolescentes negros en el metro. Tras una disputa que algunos describen como una petición de dinero, Goetz disparó contra los cuatro, hiriendo gravemente a Darrell Cabey, que quedó paralizado y con daño cerebral. Después de huir y entregarse a la policía, fue considerado un héroe por algunos, aunque su historial y las heridas abiertas alimentaron controversia. En 1987, fue declarado inocente de intento de asesinato, pero condenado por posesión ilegal de arma, y en 1996, una demanda civil le otorgó 43 millones de dólares a Cabey, quien nunca los recibió.