Los Amish viven siguiendo reglas cuidadosamente establecidas. Aunque existen variaciones en sus estilos de vida según las órdenes y afiliaciones de cada grupo Amish, en el centro de su credo está su dedicación al cristianismo y su énfasis en la importancia de la armonía en la comunidad. Por eso, evitan conscientemente lo que consideran influencias distractoras y negativas de la sociedad moderna.
Según Amish America, aunque rechazan integrarse a la red eléctrica pública para no depender demasiado del mundo moderno, los Amish han encontrado varias formas de usar electricidad fuera de la red. Piensa en acampar.
De manera similar a los estadounidenses que acampan, los Amish tienen maneras de generar y beneficiarse de la electricidad, incluyendo el uso de gas propano, generadores y baterías, según el sitio web de tecnología Make Use Of. Pero van aún más allá, con cosas como bombas hidráulicas e incluso energía solar en algunos casos.
No es que los Amish estén en contra de las bombillas o que no valoren tener lavadoras — sí las poseen y usan — pero también creen que no se puede ser impulsivo con la electricidad y la tecnología. Según Donald Kraybill, coautor de «Los Amish» y profesor en Elizabethtown College, quien habló con NPR, «Son más cautelosos — más sospechosos — preguntándose si esto será útil o perjudicial. ¿Fortalecerá nuestra vida en comunidad o la puede destruir de alguna manera?»
Los Amish benefician de la electricidad en sus propios términos
Es un proceso de reflexión interesante en un mundo donde muchas personas no solo aceptan la tecnología nueva, sino que la buscan sin pensar mucho en cómo puede afectar sus vidas a largo plazo. La tecnología se vende como algo positivo que mejorará la vida de quienes la usan. Pero los Amish dicen, “espera, analicemos los pros y los contras en función de nuestros valores y principios como sociedad y decidamos qué es lo mejor para la comunidad”. Esa es, al menos, la filosofía que siguen, según Amish America, y no se les escapa que muchas tecnologías funcionan gracias a la electricidad.
Para los Amish, han descubierto que usar electricidad es beneficioso para gestionar sus negocios, operar algunos electrodomésticos y para proveer iluminación artificial, incluyendo la iluminación en sus carretas en la noche, cuando la seguridad es crucial. También utilizan herramientas eléctricas, grandes y pequeñas, pero siempre con ingenio en la manera en que alimentan sus equipos para evitar complicarse con el exterior.
Según Amish America, los Amish también son conscientes de lo fácil que puede ser realizar tareas con diversas herramientas y electrodomésticos. Como valoran el trabajo de manera distinta a las sociedades modernas—considerándolo importante para aspectos sociales y como una forma de fortalecer el carácter de sus hijos—ellos simplemente usan lo que consideran adecuado y dejan el resto.